El pan danés proviene de Dinamarca, como su nombre lo indica, y se trata de un pan en forma rectangular de color oscuro que es muy suave y en muchas ocasiones se usa harina integral para lograr el resultado deseado. Es reconocible porque suele tener una aspecto de trenzado que lo caracteriza.
Ingredientes:
500 gramos de harina de trigo.
80 gramos de azúcar blanca.
20 gramos de levadura instantánea.
2 huevos batidos.
150 ml de agua.
60 gramos de mantequilla.
1 cucharadita de sal.
200 gramos de mantequilla adicional.
Preparación:
Mezcla el azúcar, la levadura, huevos, agua y harina en un envase grande, hasta que quede todo bien unido. Cuando tengamos una masa suave agregamos la mantequilla que debe estar derretida o a temperatura ambiente para que esté muy suave. Añade también la sal e incorpora todo.
Pon la masa en su envase a descansar por una hora para que leude. Luego de que pase este tiempo saca y en una mesada con harina trabaja hasta que esté muy suave. Unos 8-10 minutos será suficiente.
Estira la masa en un rectángulo y agrega los 200 gramos de mantequilla. Trabaja como si fuese una masa de hojaldre: dobla un par de veces por las mitades y vuelve a estirar con un maso. Repite este proceso durante unas 6 o 7 veces para que la mantequilla llegue a todos lados.
Mete la masa lista en la nevera si la vas a dejar reposar. Si vas a hornear de una vez, crea una trenza (como las que se hacen en el cabello) con el pan. Mete esto dentro de una molde para pan largo y cocina en un horno precalentado a 180°C por 25-30 minutos.
Si no sabes hacer la trenza, solo pon la masa dentro del molde o crea bollitos. El resultado final será un pan muy suave, con mucho sabor a mantequilla y ligeramente dulce.
Foto: http://www.flickr.com/photos/gregmason/
